La
fase exploratoria, si bien no constituyó el alcance de mi meta de conocerme, me
puso en contacto con mí ser, entrar en consciencia de que sí puedo sentir y
reaccionar de modo distinto ante diferentes actividades y dar el primer paso
para dar respuesta a las preguntas: ¿Qué te gusta? ¿Qué disfrutas?
A lo
largo del desarrollo de cada actividad, verificaba cuales eran las emociones o
sentimientos que éstas me despertaban. Sorpresivamente hubo actividades que
anteriormente de solo pensarlas ya me aburrían y que en este proceso exploratorio
muy contrariamente me llenaban de energía y de entusiasmo, tal es el ejemplo de
ir al Gimnasio, lo cual a pesar de ser una actividad inicialmente poco
atractiva para mí resultó ser algo que disfrutaba mucho, allí además de
ejercitarme conocí nuevas personas con quienes compartí gratos momentos.
Comprobé
que es cierto que el sudar ayuda a calmar emociones negativas y hace que
afloren positivas, que el salir y el simple hecho de observar a la gente
caminar, interactuar, vivir, te permite ver la vida desde un ángulo distinto.
Cuando
estás perdido no es fácil saber con qué te sientes bien porque hay sentimientos
de incomodidad sumamente latentes en tu corazón y espíritu, pero si es
importante en ese momento saber que hay actividades que te despiertan otras
vibraciones y que logran distraerte.
Fue
importante poder separar actividades que me hacían concentrarme y desconectarme
de aquellas que me inquietaban y con las cuales no lograba separarme de los
pensamientos abrumadores.
El
poder diferenciar estos sentimientos al realizar las acciones me permitió
entonces crear mi lista de actividades positivas y negativas.
En la Lista de actividades negativas,
incluí aquellas en las cuales seguía enganchada a mi situación, en las que mi
cuerpo estaba pero mi mente seguía en los pensamientos negativos. Por ejemplo:
hablar con personas poco afines, o de temas de poco interés para mí. Teniendo
presente que llevar a cabo algo de mi lista de actividades negativas no lo
disfruto y que solo lo hago por no estar sola, complacer, tener algo que hacer,
procuro entonces no hacerlo o no prolongar el tiempo allí sino por el contrario
invertirlo en algo de provecho para mí.
La lista de actividades positivas
está conformada por todas aquellas tareas que lograban absorberme esto indica
que son de mi verdadero interés y que no las hago para “matar el tiempo” sino
que las disfruto y generan una energía positiva que debo aprovechar. Todos
tenemos inclinaciones distintas, algunos disfrutamos tremendamente leyendo un
buen libro otros practicando un deporte es solo de explorar. Como te indico en
mi artículo El autoconocimiento PASO 1:Exploración.
Vamos!
Te invito a crear tu lista de Actividades positivas y cuando te descubras
sintiéndote desanimado es hora de que realices una de ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario